Transformando una consola de TV moderna de mediados de siglo

¿Qué haces cuando falla un mercado de Facebook? ¡Lo haces tú mismo, por supuesto!

La semana pasada compramos esta consola de televisión de mediados de siglo pensando que sería mucho mejor de lo que era. Cuando lo recibimos estaba cubierto de quemaduras de cigarrillo, rayones y mucho polvo. Como amante de los muebles de mediados de siglo, no podía renunciar a esta pieza. Los pies de metal eran demasiado buenos para dejar que esto se arruinara.

Así que preparemos papel de lija, imprimación, pintura y una plantilla de mylar personalizada .

Antes de empezar, recopilé materiales y esbocé lo que planeaba hacer.

Aquí está el plan:

Lo admitiremos, nos estamos inspirando en la antigua Atlantic City, sin las playas abarrotadas y las pérdidas en los casinos.

Materiales:

• Una plantilla personalizada o ya hecha de nuestra tienda.
• Una consola de TV horrible y sucia que necesita un poco de cariño
• Papel de lija (la mayoría de los granos están bien)
• Cebador
• Pintura de alto brillo
• Pintura en aerosol de alto brillo
• Pinceles
• cinta de pintor
• Periódico u otro papel de desecho

¡Empecemos!

Paso 1: preparación

Este hermoso hallazgo necesitaba ser limpiado, lijado e imprimado antes de pintar. Primero, usamos algunas toallitas para eliminar la suciedad, el polvo y las manchas. La chapa exterior de vinilo estaba peor por el desgaste, así que vamos a usar todo lo que esté a nuestro alcance para cubrirla.

Para asegurarnos de que la imprimación se adhiriera a la chapa, utilizamos un poco de papel de lija áspero para hacer rayones donde la imprimación pudiera agarrarse. También redondeamos algunas de las esquinas, ya que el revestimiento también comenzaba a desconcharse en algunos bordes. Esta consola estaba hecha de tablero de partículas por debajo, al que es muy fácil darle forma con un poco de papel de lija.

Por suerte, esta pieza la pudimos desmontar fácilmente como algunos muebles de IKEA. Quité las asas y también las dejé a un lado para más tarde.

Usamos una imprimación típica para interiores de casas. Dos capas fueron suficientes para preparar el color de pintura final. Al imprimar, no es necesario asegurarse de que toda la pieza esté cubierta de blanco. Dimos unas dos capas antes de pintar.

¡Guau! El cebado está hecho. Vayamos a la parte divertida.

Paso 2: pintar

Elegí una pintura naranja brillante de alto brillo para transmitir realmente la sensación retro que quería para esta consola.

Nuestra pintura era relativamente fina, por lo que es posible que sean necesarias algunas capas para que quede bien. Antes de usar la plantilla, querrás asegurarte de que la pintura se seque por completo. Si no lo hace, corre el riesgo de que el mylar se pegue a las capas pegajosas de pintura.

Paso 3: usando tu plantilla

Ahora viene la parte que estábamos esperando: ¡la plantilla! Creé una plantilla personalizada para este proyecto con la forma de unas estrellas retro.

Comencé ubicando el centro de las puertas que planeaba pintar usando una regla y un lápiz. Como voy a rodear la plantilla con un poco de papel para proteger el resto de la puerta, necesitaré orientación sobre dónde colocar la plantilla.

Una vez que hice mis marcas, usé un poco de periódico para rodear la plantilla y la aseguré con cinta de pintor.

Utilicé una pintura en aerosol de alto brillo Rust-Oleum que normalmente se usa para muebles para combinar con el acabado de alto brillo de la pintura naranja. Con unas cuantas rociadas rápidas, tendremos bonitos detalles en nuestras puertas.

Repetí el mismo proceso en la parte superior de la consola y creé un patrón a partir de una sola plantilla.

Paso 4: toques finales

¡Casi llegamos! Sólo tenemos que hacer algunos cambios finales antes de que podamos decir que hemos terminado por completo.

Las manijas eran de un aburrido color marrón metálico, así que usé la misma pintura en aerosol para darles un color azul brillante.

Una vez que todo estuvo seco, llegó el momento de volver a montar la consola. Con las puertas y las patas nuevamente en su lugar, ¡estábamos listos para tomar algunas fotografías finales!

Pudimos transformar este mueble de algo destinado al basurero a una pieza retro divertida y colorida.